En el mundo actual habilitado para la nube impulsado por la transformación digital y el trabajo híbrido, las organizaciones deben alinear las iniciativas de seguridad de datos con las tendencias modernas que cambian a la velocidad de la nube. Además, cada organización tiene necesidades específicas de protección de datos y casos de uso únicos, porque los programas de protección de datos nunca son exactamente iguales. Es por eso que solo una arquitectura de prevención de pérdida de datos (DLP) entregada en la nube puede garantizar una alta flexibilidad, gran escalabilidad y poder de cómputo ilimitado. La nube también significa mantenerse actualizado en todo momento, con protecciones siempre activas y actualizaciones disponibles en tiempo real. Una tecnología DLP en la nube como servicio es claramente el enfoque correcto para la protección de datos empresariales, pero no debería ser el único criterio a considerar al pasar a una estrategia de protección de datos efectiva.
Una tecnología DLP debe ser adaptable, rica en funcionalidad, amplia en cobertura y profunda en efectividad. También debe proporcionar un alto grado de eficacia para garantizar una protección de datos precisa para cualquier tipo de datos, en todos los entornos y contra todos los riesgos de pérdida de datos.